Saturday, March 25, 2006

PREHISTORIA DEL KOXMOZ: Kapítulo Menos Uno


El miembro más veterano de Koxmoz, se sabe, es su DJ y productor Kox-T, antes conocido como Tortuga. Personaje inevitable a lo largo de toda la historia del hip hop argentino nueva escuela. Desde su paso por Los Adolfos, la primera banda de rap argentino, a comienzos de los 90’s hasta estos días, nunca a dejado de ser una figura influyente en la escena, sinónimo de vanguardia y experimentación musical sin límites.

Tumbas fue una de las bandas más importantes de la escena bajo el reinado de Almada y su Nación Hip Hop (1996-1998). Se diferenciaban del resto por apuntar más a la complejidad musical que al gangsterismo y la protesta política redundante, por lo que en cierto sentido no fueron muy entendidos por el público de esa época. Después de participar en el primer compilado Nación Hip Hop (BMG 1997), Tumbas siguió trabajando en el proyecto de su disco debut que nunca vería la luz, bajo el padrinazgo de Zeta Bosio, bajista de Soda Stereo. Como resultado de esa relación, Tumbas llegó a presentarse como teloneros del show despedida de Soda Stereo en el estadio River Plate, frente a sesenta mil personas. Una exposición que nunca había alcanzado un grupo de hip hop argentino.
Después de la disolución de Tumbas, hacia finales del ’98 Tortuga se enfocaría en su carrera de DJ y productor y acabaría editando en el 2001 su disco de hip hop instrumental progresivo bajo el pseudónimo de Deep Taboo. Para esa época ya había pasado a formar parte de La Organización, como DJ invitado y de ahí quedó entablada la relación con Apolo e Interceptor (a.k.a. Chili Parker) para pasar a formar Koxmoz y seguir haciendo historia...






La entrevista aquí reproducida es del año ’97 y salió publicada en el número #2 de Moshpit Posse. La foto, de Mr Sur, muestra a los entonces miembros de la agrupación en los pasillos de Cemento, el día de su primer recital en ese escenario. Después de ver el vergonzoso diseño gráfico principiante del fanzine, Tortuga, en aquel entonces diseñador de una marca de ropa reconocida, pasó a ser el diseñador invitado de muchas de las portadas de la revista.


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Este es "Siete Puntas", quizás el mejor tema de Tumbas y musicalmente hablando uno de los mejores temas de rap de su época. Iba a formar parte del disco debut que Tumbas estaba preparando (y nunca salió), pero finalmente sólo se editó en cassette promocional junto a otros tres temas para la gira del grupo por Chile, por lo que en Argentina es casi un tema inédito.

Friday, March 24, 2006

HIP HOP NATION #9



Abril del 2001, apenas unos días antes de mi mudanza a los Estados Unidos, sale publicada en España mi primera y última entrevista con La Organización. Para esa época el tema "Lección Número Uno", de Mangaka (mi viejo alter-ego) y Apolo había ya llegado a los oídos del público ibérico y era hora de hacerles conocer el nombre de La Oz que en Argentina, por esos días, se perfilaba como el súper-grupo con mayor proyección y poder de convocatoria. Lamentablemente La Organización se disolvió antes de dar sus frutos, con la partida de Mustafá Yoda y aquel mito se quedó en promesa incumplida...



ESTILO LIBRE TRANSANDINO


Era una tarde de domingo con lluvia en Buenos Aires, allá por el año dos mil. Los pocos oyentes de FM Plur escuchaban con atención Bla-Bla-Bla, el único programa de radio de aquel entonces, que se dedicaba en exclusiva al hip hop.
Casualmente se encontraban de visita en la capital argentina en aquellos días dos eminencias del hip hop chileno: Sr. Miranda (ahora conocido como Koala Contreras) del grupo FDA y Anita Tijoux, de los recientemente disueltos Makiza (que cuatro años más tarde se volverían a reuinir).

Empapados llegaron los dos hasta el estudio de la radio en el microcentro porteño, escoltados por dos miembros de La Organización, Apolo Rodas y Mustafá. En la radio sonaba Black Star, así que dejamos nomás el disco puesto y sobre la pista instrumental remixada de Respiration, le dimos libertad de expresión a los cuatro rimadores expertos para que hiciesen de las suyas. El resultado es este freestyle inédito que algún oyente sabio grabó en cassette y luego digitalizó y hoy anda dando vueltas por internet en formato MP3. Una verdadera reliquia.


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PREHISTORIA DEL KOXMOZ: KAPITULO ZERO




Corría el año 1998 y el hip hop argentino estaba en crisis. Hasta ese entonces la escena había girado en torno a un único eje, el manager Alejandro Almada y su colectivo Nación Hip Hop, encabezado originalmente por el Sindicato.
Desde la revista Moshpit Posse -en esa época el único medio de comunicación de la escena local- veníamos insistiendo con la necesidad de independizar al rap argentino, de que surgiesen nuevos artistas, eventos, conciertos, campeonatos, discos, etc que no necesariamente pasasen por las manos del único manager del movimiento. Este tipo, Almada, mientras tanto se había dormido en loss laureles, su mejor grupo, el Sindicato, se había desprendido del colectivo y los shows de los artistas de Nación Hip Hop venían perdiendo poder de convocatoria velozmente.



Entonces, casi de la nada, surgió esta organización de fans puristas del hip hop que se habían mantenido alejados de la llamada Nación. Bajo el nombre de Mustafastapolo, o simplemente MFA, el trío compuesto por el freestyler Mustafá, el graffitero Rasta y el b-boy Apolo empezaron a organizar la escena y su éxito fue instantaneo, con un poder de convocatoria increíble y con la credibilidad callejera que Almada y los suyos no tenían.

Hasta ese entonces yo sólo conocía a Rasta por ser vecinos de Caballito y lo había cruzado a Apolo alguna vez en las pistas de break, de Mustafá sólo había escuchado rumores. Era muy poco lo que se sabía realmente de estos personajes. Una noche en La Meka me lo crucé a Rasta y le tiré la idea de hacer una entrevista para mi revista.

La Moshpit en sus nueve números anteriores había apoyado casi incondicionalmente a los artistas Nación Hip Hop, pero en su número diez pegó un giro de ciento ochenta grados que muchos no se esperaban (la tapa de la revista dejaba bien claro lo de “independiente” para deshacerse de cualquier conexión posible con la escena de Almada). Los tres miembros de la MFA tenían cierta razón en desconfiar de mis intenciones y me costó un poco convencerlos para que accediesen a aparecer en las páginas de mi revista. Pero yo tenía bien en claro lo que quería para el hip hop argentino y al escucharlos contestar mis preguntas a estos tres arrogantes personajes, me di cuenta de que los cuatro apuntábamos hacia el mismo lugar y teníamos un entendimiento similar de lo que el hip hop significaba.

Muchos a posteriori, me acusaron de amiguismo al referirme como periodista a La Organización, pero lo cierto es que cuando hicimos esta entrevista no éramos para nada amigos. Fue la primera vez que me dieron cabida y hablamos. Pero la conexión de mentes fue instantánea y a partir de ahí se fue fundando una suerte de alianza tácita entre MFA y La Turma. Yo los presenté como “la esperanza nacional del hip hop verdadero” y ese fue el comienzo del fin para mis relaciones diplomáticas con la escena establecida. Me acuerdo de que miembros del Sindicato y Encontra Del Hombre, después de haber leído ese número de la revista vinieron a encararme con mala onda, acusándome de falta de objetividad y de que yo estaba ayudando a destruir la escena que ellos se habían esforzado tanto en conformar.